Distribución de alumnos en los grupos por Asesor

Distribución de alumnos en los grupos por Asesor

por Salvador Villarreal González

salvadorvglz@yahoo.com.mx

Cuando has sido maestro en los primeros grados y luego pasas a formar parte docente de los semestres finales, es evidente que conoces a algunos alumnos, particularmente aquellos que formaron parte de los grupos o secciones que fuiste docente.  Es por eso explicable que ellos quisieran que uno mismo fuera su maestro de cuarto; o que algunos de ellos te tocaran como alumnos. Y siguiendo la sabiduría popular: "más vale malo por conocido que bueno por conocer".

Generalmente los maestros de cuarto, por la carga horaria que se requiere (33 horas) quedan limitados a ese grado y a funciones académicas por Departamento, y son pocos los que pueden tener otras asignaturas en grados inferiores. Así pues, el conocimiento de los maestro de cuarto por parte de los alumnos que ingresan al 7º semestre es nulo en experiencia directa,  pero al mismo tiempo es rico  en creencias formadas por las representaciones sociales que dan las alumnas salientes, de acuerdo a su experiencia en la relación o según el dicho:"como les fue en la feria" a cada quien. 

Puede haber muchas formas de organización de los nuevos grupos de alumnos; como estrategia general de organización grupal, la escuela propone una redistribución del alumnado en cada año escolar  en función de sus calificaciones (actualmente se están considerando la inclusión de otros elementos, como nivel de liderazgo y de estilos y enfoques de aprendizaje del alumno, obtenidos por aplicaciones del Departamento de Desarrollo Humano), es decir,  se hace un listado de alumnos por calificación semestral en cada  sección y luego  una "canasta revuelta" -no como dinámica de presentación, sino como forma de distribución-, de tal suerte que en los nuevos grupos se tengan alumnos de todas las secciones anteriores y con un balance en sus calificaciones o rendimiento escolar (igual número de alumnos con altas, medias y bajas calificaciones). 

Se tiene la idea de que esto promueve la necesidad de establecer nuevas relaciones sociales y de amistad  entre los alumnos - y promover así esta competencia social- y un conocimiento mayor del grupo generacional por vivencias directas; además, permite el "romper" aquellos grupos de amistades que no siempre favorecen el desarrollo personal y profesional requerido en la carrera. Como quiera, si se hizo un  fuerte lazo de amistad, esta circunstancia temporal no será motivo de su rompimiento, sino la ocasión de fortalecerla. Por otro lado, la escuela promueve sistemáticamente el trabajo por equipos, tengan o no lazos de amistad, porque se trata de un competencia a desarrollar como rasgo de perfil de egreso en su identidad profesional y ética: saber trabajar en equipo y valorar esta forma de organización en su práctica docente.

En pocas palabras, ni los maestros escogen a sus alumnos, ni los alumnos a sus maestros.